09/23/2024

El impacto del clima holandés en los expatriados: cómo afrontarlo y prosperar

Si te has mudado recientemente a los Países Bajos, probablemente ya habrás notado que el clima puede ser bastante diferente al que estás acostumbrado. El clima holandés, con sus frecuentes lluvias, cielos nublados e inviernos largos, puede ser un desafío para muchos expatriados. Pero con la mentalidad adecuada y algunos consejos prácticos, no solo podrás adaptarte al clima holandés, sino también aprender a apreciar su carácter único.

1. Comprender el clima holandés

Los Países Bajos tienen un clima marítimo templado, lo que significa inviernos suaves, veranos frescos y abundantes precipitaciones durante todo el año. Si bien las temperaturas rara vez alcanzan valores extremos, es su imprevisibilidad lo que a menudo sorprende. Se pueden experimentar las cuatro estaciones en un solo día, con cambios repentinos de sol a lluvia, e incluso alguna que otra granizada.

Consejo: Lleva siempre contigo un paraguas o una chaqueta impermeable. Invertir en un buen impermeable es fundamental para vivir en los Países Bajos.

2. El impacto en el estado de ánimo y el bienestar

Los días oscuros y lluviosos pueden afectar el estado de ánimo, especialmente durante los meses de otoño e invierno, cuando la luz del día es escasa. El trastorno afectivo estacional (TAE) es un problema común entre los expatriados, ya que la falta de luz solar puede provocar letargo, tristeza e irritabilidad.

Consejo: Para combatir los efectos del TAE, considere usar una lámpara de fototerapia que imite la luz solar natural. Además, intente pasar tiempo al aire libre durante el día, aunque sea para dar un paseo corto.

3. Adoptar el enfoque holandés: “Niets aan te doen”

Los holandeses son conocidos por su actitud práctica y resiliente ante el clima, resumida en la frase "niets aan te doen", que se traduce como "no se puede hacer nada al respecto". En lugar de dejar que el clima dicte su estado de ánimo o sus planes, los holandeses simplemente lo aceptan como parte de la vida. Esta mentalidad puede ser increíblemente útil para los expatriados que intentan adaptarse.

Consejo: En lugar de cancelar planes por el clima, disfrútalo. Ya sea andar en bicicleta bajo la lluvia o disfrutar de una tarde acogedora en casa, encontrar alegría en cualquier condición climática puede marcar una gran diferencia.

4. Mantenerse activo en cualquier clima

Mantenerse físicamente activo es clave para mantener el bienestar, especialmente durante los meses más oscuros. Los holandeses no dejan que la lluvia les impida salir, y tú tampoco deberías. Ya sea en bicicleta, corriendo o simplemente dando un paseo rápido, mantenerse activo te ayudará a mantener el ánimo.

Consejo: Apúntate a un gimnasio o a un club deportivo de interior para mantenerte activo durante el invierno. Como alternativa, considera actividades como la natación en interiores o el yoga, que no dependen del clima.

5. Aprovechar al máximo los días soleados

Cuando salga el sol, notarás que todo el país cobra vida. Las terrazas se llenan, los parques se llenan y todo el mundo parece estar de mejor humor. Aprovecha estos días soleados para pasar el máximo tiempo posible al aire libre, ya sea haciendo un picnic en el Vondelpark, dando un paseo en barco por los canales o simplemente disfrutando de un café en una terraza.

Consejo: Mantente al tanto del pronóstico del tiempo y planifica actividades al aire libre para los días más soleados. Aplicaciones como Buienradar son excelentes para seguir la lluvia y aprovechar al máximo los breves días de sol.

6. Creando un ambiente hogareño acogedor

Dado que probablemente pasarás más tiempo en casa durante los meses de lluvia, crear un ambiente acogedor y acogedor es crucial. El concepto danés de "hygge" (acogedor y cómodo) es similar al neerlandés "gezelligheid", y ambos enfatizan la importancia de la calidez, la luz y la convivencia.

Consejo: Invierte en mantas cálidas, velas y quizás algunas plantas de interior para alegrar tu espacio. Organizar una pequeña reunión de amigos también puede aportar calidez y comunidad a tu hogar.

7. Encontrar alegría en las tradiciones invernales holandesas

Aunque el invierno puede ser largo y oscuro, también es época de tradiciones holandesas únicas que pueden traer mucha alegría. Desde patinar sobre hielo en canales congelados hasta celebrar Sinterklaas, estas experiencias culturales pueden hacer que los meses de invierno sean más agradables.

Consejo: Participa en las actividades invernales locales. Visita un mercado navideño, prueba el patinaje sobre hielo o disfruta de algunas delicias tradicionales holandesas de invierno, como oliebollen (bolas de masa fritas) y erwtensoep (sopa de guisantes).

Aunque el clima holandés puede ser desafiante, también es parte integral de la experiencia holandesa. Al adaptar tu mentalidad, mantenerte activo y adoptar la cultura local, no solo podrás sobrevivir, sino también prosperar en el clima cambiante de los Países Bajos. Recuerda, no se trata solo de soportar el clima, sino de encontrar maneras de disfrutar la vida, llueva o truene.

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